Crisis, La lección de sentido parte- 8


fotrografía por gregory colbert



Una nueva mirada


Miremos la crisis de una nueva forma, ya sin miedo, ahora con esperanza. Pues es el señalador de lo insano, caduco y entremos en una nueva etapa.

Entonces las crisis deja de ser un monstruo para ser un aliado. Una oportunidad única y feliz para revelar lo que realmente somos.

La generación de la primera mitad del siglo xx (nuestros padres) tuvieron otro llamado, y se libraron las guerras y salvaron al mundo cuando atravesaba un gran peligro. Ahora nuestro llamado es otro, hemos de comprender que en nuestro interior habita un gran poder que puede ser cultivado y extendido, una capacidad de crear. Sólo hay que liberarla de las fuerzas del miedo que la atan. Una energía mental que es inherente a nuestra condición humana y nos despierta a lo que realmente somos. Seres de amor.

Cuando hablo de amor, no me refiero al enamoramiento o al apego a la persona que llamamos “amada”, si no a la sustancia que cohesiona nuestro universo, la naturaleza entera y a nosotros mismos. La expresión externa de la unidad.

Superar el Edipo, significó una crisis, y si aprendimos la lección fuimos capaces salir al mundo tras haber asumido en nuestro interior a nuestro padre. Que ya no está afuera, separado de nosotros mismos, ahora es un símbolo interno que nos da fortaleza y guía.
Vivir la adolescencia, otra crisis, en busca de lo verdadero, en la que encontramos nuestra identidad y nuestra ética y así cada etapa de nuestra vida.
El salir de casa de los padres y empezar a ser responsable por la propia vida.
El primer año de matrimonio mientras nos adaptamos a una nueva forma de vida, ahora en pareja.
La llegada del primer hijo y la reacomodación de la pareja que pasa a ser además padres.
Los cuarenta años y la revisión de lo que hemos conseguido y nuestros sueños originales.
La marcha de los hijos y el reencuentro de la pareja.
La jubilación.
La tercera edad y la revisión de toda nuestra vida y nuestro legado.
Estas y muchas más son las pequeñas crisis que atravesamos en nuestro discurrir por la vida.

Como humanidad también atravesamos etapas: tribus, clanes, nómadas, sedentarios, sistemas de esclavitud, sistemas feudales, revolución industrial, capitalismo y cada transición una crisis.

Crisis todas con un único objetivo: despertar en nuestra consciencia el recuerdo que somos seres de amor viviendo una vida en la tierra, seres con capacidad de crear.

Para superar el miedo, hemos de recuperar la esperanza celosamente guardada en el cofre de la confianza. He aquí otra de las llaves a recuperar: la confianza. Que no es más que la fianza en el corazón.

Con Confianza, iniciativa, valor y responsabilidad podremos juntos responder a la llamada de shambala y crear un mundo nuevo.



María Arboleda
Octubre 2008